Bajo Madrid se puede encontrar una extensa red de túneles, y no se trata tan solo de la M-30 y sus galerías asociadas para emergencias y mantenimiento. Existen también otros caminos subterráneos que recorren las entrañas de la capital, de una antigüedad mayor que la carretera que circunvala Madrid. Esas galerías y esos pasadizos bajo tierra pudieran haber sido recorridos por los personajes de la novela «El falso espejo del rey Salomón».
Ya en sus primeros compases de la historia, Mateo Sanz y compañía se trasladan desde el Palacio de Buenavista hasta la estación de Atocha utilizando una red de pasadizos subterráneos. Si bien no hay constancia de que ese túnel específico exista, al menos en la época en la que transcurre la novela, sí que está probado que bajo la superficie de la ciudad podemos encontrar varios pasadizos en los que se inspiran.
Uno de ellos data de la Guerra Civil española. Aprovechando galerías subterráneas ya existentes, se construyó un búnker antiaéreo bajo la Plaza de Cibeles, y en él se estableció la sede subterránea del Estado Mayor del Ejército de la República. Se comunicaba con el cercano Palacio de Buenavista, sede del Ministerio de la Guerra.
Otra inspiración para esta red de túneles que en la novela llevaban del Palacio de Buenavista a la estación de Atocha, es la red de metro de Madrid, y más concretamente la línea 1. Desde 1871 existe el tranvía en Madrid, en un primer momento tirado por caballos, y a partir de 1879 propulsado por motor de vapor. Puesto que, ya en esa época, la congestión del tráfico madrileño es elevada, desde 1886 se anuncian planes para crear una red de ferrocarriles subterráneos, al estilo del londinense (inaugurado en 1863), aunque no es hasta 1916 cuando uno de estos proyectos, de cuatro líneas de metro, es aprobado. Las obras para su construcción se iniciarán en 1917 y, dos años más tarde, Alfonso XIII inaugurará la primera línea de Metro, que transcurría, en su fase inicial, entre el barrio obrero de Cuatro Caminos y la Plaza del Sol. En 1921, con la primera ampliación de la red, llegará a Atocha.
En la novela «El falso espejo del rey Salomón» el túnel que lleva a Atocha se inunda, oportunamente, en un momento dado. La base para esta fantasía recae en unas galerías excavadas bajo el Banco de España. Allí se encontraba la cámara acorazada donde se guardaban abundantes riquezas y, según cuentan, estos corredores incluso dispondrían de una pequeña línea de ferrocarril. Para proteger los accesos no autorizados, existía un sistema de seguridad por el que, de darse el caso, se inundarían estas galerías mediante la apertura de un conducto que comunica con el canal de agua subterráneo que abastece a la cercana fuente de Cibeles.
No sería este trayecto «Palacio Real – Estación de Atocha» el único que Mateo Sanz y Marie Poitiers recorrían bajo Madrid en la novela. Otro les llevaría desde el Teatro Español al Palacio Real, en la Plaza de Oriente.
Son varios los pasadizos y túneles que, se dice, conectaban el Palacio Real con otros puntos de la capital. El que más a menudo se suele citar, quizás por ser el más antiguo, es el llamado «Pasadizo de la Encarnación». Este túnel, de 1612, conectaba el antiguo Alcázar de los Austrias (se ubicaba en el mismo lubar en el que posteriormente se erguirá el Palacio Real) con el Monasterio de la Encarnación. Aunque en un principio se utilizaba para que la familia real acudiera a las celebraciones religiosas sin ser vistos, los rumores dicen que Felipe IV lo inundó para recorrerlo en góndola y así visitar a una amante, novicia en el convento. Si ésto era cierto, y si se trataba de ese mismo «Pasadizo de la Encarnación» u otro diferente, ha quedado oculto en las brumas del tiempo.
La galería subterránea que sí está documentada es la que comunicaba el Palacio Real y el Teatro Español, ya que éste se erigió sobre los terrenos ocupados por el Monasterio de Santa Ana, pero se conservó la cripta funeraria, a la que era posible acceder por el bar del teatro. En la antecámara de la cripta se encontraban tres pasillos; uno de ellos llevaba al palco de la familia real y el resto a distintos edificios y conventos de Madrid. José Bonaparte, en su breve estancia como rey de España, mandó destruir este pasadizo, aunque aún persisten partes del mismo.
El propio Bonaparte da nombre a otro túnel, el Túnel Bonaparte, puesto que él fue quien lo mandó construir, y conectaba el Palacio Real con la Casa de Campo. Atraviesa el Campo del Moro para llegar a la residencia de los Vargas, en la Casa de Campo.
No son estos los únicos caminos subterráneos de la capital: otro túnel conectaba el Palacio Real con la Farmacia de la Reina Madre, en la calle Mayor; un pasadizo llevaba desde la ya citada Casa de los Vargas, en la Plaza de la Paja, hasta la Capilla del Obispo de Plasencia; el Ateneo de Madrid comunicaba por un túnel con el Congreso de los Diputados, la Fábrica de Porcelanas del Retiro también llegaba, por una galería subterránea hasta Atocha… En fin, todo edificio de Madrid que se preciara tenía su propia salida bajo tierra, y eso sin contar con la cantidad de galerías que surcaban la ciudad para abastecerla de agua y que datan, al menos, del tiempo de los árabes.
Si quieres saber un poco más sobre los túneles bajo Madrid, puedes acceder a los siguientes enlaces:
- https://es.wikipedia.org/wiki/Historia_del_Metro_de_Madrid
- https://www.ionlitio.com/madrid-subterraneo-tuneles-secretos-de-la-villa/
- https://elpais.com/diario/1987/02/01/madrid/539180658_850215.html?event_log=regonetap
- https://therombocode.es/guia-del-madrid-subterraneo/
- https://gacetademadrid.com/metro-de-madrid-historia/
- https://okdiario.com/madrid/pasadizos-secretos-del-palacio-real-madrid-que-usaban-hacia-donde-dirigen-9098434
- https://www.larazon.es/madrid/estos-son-tuneles-pasadizos-secretos-palacio-real-madrid_20230206660cf71f5e1b1f000125931d.html
- https://www.msn.com/es-es/noticias/virales/los-t%C3%BAneles-y-pasadizos-ocultos-del-palacio-real-de-madrid/ar-AA1CvC87
- https://www.telemadrid.es/noticias/madrid/Madrid-bajo-tierra-secretos-subterraneos-0-2354764512–20210629084757.html
- https://www.rutasmadrid.es/articulo/el-tunel-de-bonaparte/
Este artículo forma parte de la serie de artículos «Lugares, artilugios y otras locuras», relacionados con la novela «El falso espejo del rey Salomón».

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